Celanova es una villa ligada a la existencia del monasterio fundado por San Rosendo, y fue creciendo gracias a estar en camino frecuentado y ser cabecera de comarca.
La villa tradicionar se distribuye en torno a tres plazas y cuatro calles.
La Calle de la Botica está constituida por una acera de casas frente al segundo cuerpo del monasterio, en el que estuvo la farmacia conventual. Al final de la calle se encuentra un pequeño jardÃÂn con el busto de Curros Enriquez; y del otro lado de la calle, la Alameda y el "Campo das Triguerizas" donde se hacÃÂa la feria.
Al final de la calle de La Botica se abre la Plaza do Millo (Plaza del MaÃÂz), asoportalada, con fuente y crucero. De aquàparte la Rua Abaixo (Calle Abajo), antigua calle hidalga con edificaciones de la Edad Moderna. Este conjunto es la parte más fotografiada de la ciudad.
La empinada Rua de Curros Enriquez , antiguamente Rúa Arriba, que era un antiguo camino y en ella se encuentra la casa del poeta.
La Plaza Mayor, muy notable, se abre al pie de la iglesia del monasterio; tiene un espolón al oeste. Su principal ornato es una fuente barroca del s. XVIII, sacada del claustro del monasterio. Se dice que quien bebe agua del caño norte, enloquece.
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